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Leer la Parasha y Haftará

La parashá inicia con el encuentro maravilloso de Yacov y Rajel, su futura esposa, todo ocurre en un pozo donde nuestro patriarca encuentra con la presencia de tres rebaños. Yacov pregunta por Labán y en ese momento se acerca Rajel con su rebaño.

Dijo él: «El día es largo aún; todavía no es momento de reunir el rebaño; dadle de beber a las ovejas y continuad pastando».

Ber 29:7

Aquí nuestro padre Yacov determina el tiempo basado en los astros, ya que la luz del sol es la que determina el día y el texto sigue:

Mas ellos dijeron: «No podremos hasta que todos los rebaños hayan sido reunidos y hagan rodar la piedra de la boca del pozo, entonces daremos de beber a las ovejas». 

Ber 29:8

Pero en el siguiente versículo vemos que el beber del pozo no dependía del tiempo sino de que estuvieran todos los rebaños,  sólo hasta ese momento se abriría el pozo y se daría de beber a las ovejas. Entonces nosotros podemos ver que el tiempo no está determinado por los astros si no por los eventos, y el evento para abrir el pozo es que llegue Rajel con su rebaño, eso es lo increíble. Rajel es la madre de Yosef, padre de Efraím, por lo que Rajel es representada como la madre de los hijos de Israel en la dispersión. El pozo hace referencia al pozo de agua de la Torá, y de acuerdo a los profetas es ese pozo que Judá quiso guardar para sí mismo.

Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen agua.

Jer 2:13

Todo el tiempo Judá cerró sus puertas de conocimiento hacia todos los pueblos,  los gentiles representados en esos tres rebaños están esperando a que se abra el pozo para poder beber eso representa el tiempo de los gentiles luego de las 70 semanas de Daniel. Los gentiles ya llegaron al pozo pero la señal para que sea abierto es la aparición de Rajel y su rebaño, representando a las 10 tribus perdidas de Israel.

Es importante notar que según la narrativa de la Torá que ni Yacov, ni los tres rebaños piden agua, sino sólo el rebaño de Rajel. Esa agua que representa todo el conocimiento a lo largo de los siglos de Judá de la que ellos no beben,  no la disciernen, no la viven sino solo son poseedores de esa sabiduría, ya que sólo el rebaño de Rajel junto con el espíritu del Mashiaj puede beber de esa agua, discernirla y ser vivificados por ella.

Shabat Shalom

R. Yehuda ben Israel