En esta porción podemos ver hasta cierto punto lo fácil que fue para Itzjak encontrar esposa, una esposa que según la escritura no tuvo problema para amarla desde que la conoció.
Génesis 24:64-67
Rebeca alzó sus ojos, vio a Isaac, y dejándose caer de
lo alto del camello, dijo al siervo: ¿Quién es ese varón que viene por el campo a nuestro encuentro? El siervo dijo: Es mi señor. Entonces ella tomó el velo y se cubrió. Y el siervo le contó a Isaac todas las cosas que había hecho. E Isaac la introdujo en la tienda de su madre Sara y tomó a Rebeca por
mujer, y la amó. E Itzjak fue consolado después de lo de su madre.
Seguramente ningún joven de hoy en día estaría dispuesto a casarse con una mujer que apenas está conociendo, como dicen muchos “hay que sentir una química entre ambos y tomarse en tiempo para conocerse”. Pero es importante hacer notar la diferencia de conciencia y valores que el patriarca tenía son definitivamente super distantes de los que las sociedades de hoy en día promulgan y debido a eso es que
los jóvenes o no se quieren casar por ser incapaces de escoger una mujer con la que quieran emprender un matrimonio, o se casan “de quien se enamoran”, un enamoramiento fortuito que llegó en el tiempo menos esperado y con la persona que menos se pensó que pudiera pasar.
Los narrado en nuestra parashá no es lo que ahora llaman “amor a primera vista” que designa precisamente ese evento fortuito de “me enamoré” con una persona del sexo opuesto en el primer momento en que se conoce.
Más bien es el resultado de madurez y conocimiento de lo que es correcto por parte del patriarca, examinemos la narrativa para aprender un poco de lo sucedido.
OBJETIVIDAD
El hecho de que el siervo Eliezer fue enviado para escogerla nos enseña objetividad pura, no hay sentimiento ni emociones que cieguen la escogencia, según las indicaciones de Avraham que no fueron muy específicas Eliezer tenía que escoger mujer para Itzjak, para eso era necesario sabiduría representada por Avraham para saber que tipo de mujer no era ideal, más que saber cuál era la ideal.
Y te haré jurar por YHVH, Dios de los cielos y Dios de la tierra, que no tomarás para mi hijo mujer de las hijas de los cananeos, en medio de los cuales yo habito, sino que irás a mi tierra y a mi parentela y tomarás mujer para mi hijo Isaac.
Génesis 24:3-4
Al parecer la sabiduría manifestada es tener claro lo que no se quiere o se debe unir a nuestra vida, las mujeres cananeas eran portadoras de una maldición y por eso Avraham no quería una para su hijo.
Al despertar de su embriaguez, Noé supo lo que le había hecho su hijo menor, y dijo: ¡Maldito sea Canaán! Siervo de siervos será a sus hermanos.
Génesis 9:24-25
Así que, si tenemos un poco de sabiduría, ella debería indicarnos el tipo de mujer que no es buena para mi vida, ya que sería ligarme a una maldición para mi vida, sino se tiene claro ese punto, es por falta de sabiduría. Pero sino se tiene la sabiduría para saber que tipo de mujer no es buena para mí, hay que preguntarle a un sabio.
Y es importante resaltar que la sabiduría es simple y lo simplifica todo, así la respuesta a esa interrogante tiene que ser simple y no una lista interminable de cualidades negativas.
Para Avraham solo quería que no fuera cananea de manera inflexible y por lo tanto en la tierra de la familia de él era una opción. Es importante recordar que la familia de Avraham era idólatra por lo tanto no andaba buscando pensamientos similares. Como lo dijimos la sabiduría es simple.
BONDAD
Como un aporte de Eliezer que es la objetividad, sin ninguna característica específica dada por Avraham busca una mujer que fuera bondadosa, inclinada a ayudar a un extranjero como él, que sintiera empatía por la necesidad ajena y que estuviera dispuesta a hacer más de lo que se le pide.
Génesis 24:12-14
Y dijo: ¡YHVH, Dios de mi señor Abraham, haz que hoy me ocurra, te ruego, haz misericordia a mi señor Abraham! He aquí, yo estoy junto a una fuente de agua, y las hijas de los habitantes
de la ciudad salen a sacar agua. Sea, pues, que la joven a quien yo diga: Inclina tu cántaro, te ruego, y
beberé, y ella responda: Bebe, y también abrevaré tus camellos, ésa sea la que designaste para tu siervo Isaac, y por ella sabré que has hecho misericordia con mi señor.
Esas son las características para Eliezer de una mujer ideal para el hijo de su señor, no hubo un interrogatorio sobre sus gustos y objetivos de la vida, sobre sus capacidades o estudios que tenía, no pidió un CV para saber con quien trataba, para Eliezer (objetividad) siervo de Avraham (sabiduría) esa era una característica única que no podía faltar en la mujer ideal para Itzjak. Un corazón noble vale oro
para Eliezer.
Y así es como Itzjak, confiando en la sabiduría de Avraham y la objetividad de Eliezer, sin darle valor alguno a un sentimiento o emoción al que hoy en día podrían llamar amor, dice la escritura que la tomó como mujer y la amó.
Tan simple como eso, tal simple como la sabiduría lo es.
Shabat shalom
R. Yehuda ben Israel